“Símbolo de comunidad y dedicación.” Machu Picchu, la Ciudad Perdida de los Incas, es considerada una obra maestra de la arquitectura y la ingeniería. Sus peculiares características arquitectónicas y paisajísticas lo han convertido uno de los destinos turísticos más populares del planeta.
La ciudad fue una fortaleza enclavada en un área muy inaccesible de los Andes, escondida dentro del bosque tropical y construida con una localización geográfica privilegiada que combina las montañas sagradas, agua corriente y un alineamiento celestial casi perfecto, un excelente trabajo en piedra y un gran número de terrazas para agricultura en un lugar tan inaccesible, es impresionante.
La majestuosidad de Machu Picchu no deja de ser reconocida por el mundo entero. Es uno de los monumentos arqueológicos más importantes del mundo, declarado por la UNESCO como Patrimonio Cultural de la Humanidad.
Recientemente, ha sido reconocida como una de las siete maravillas del mundo. Este reconocimiento, paralelamente, ha significado un reconocimiento mundial a la cultura milenaria de los incas. Miles de peruanos alrededor del mundo ratificaron su alegría por la designación de la ciudadela inca, rica en valor cultural e historia; indudablemente, orgullo de todos los peruanos.
Visitar Machu Picchu constituye una experiencia inolvidable. Lo místico que desprenden sus imponentes muros pétreos, inspiran un profundo respeto por los constructores de esta monumental obra, quienes supieron conjugar, como nadie en el mundo, el artificio de su creación con la caprichosa y salvaje naturaleza.
“Símbolo de comunidad y dedicación.”